Los participantes reciben su primera recompensa, ¡15 millones para cada uno de los participantes del Desafío!, bien lo dijo Ángel: “El Desafío no regala nada”. Ya dentro de poco cada uno de los representantes de las regiones sabrá cuál será la dinámica del dinero dentro del juego.
En el Desafío de Salvación, la puntería puso nerviosos a los competidores, cada uno de los integrantes tenía una misión: entregar bien su balón para que, al final, el más afinado en el tiro logrará alcanzar la victoria. La habilidad jugó un papel muy importante.
El Desafío a Muerte probó con llamas a los Costeños y a los Súper Humanos, compitieron en una carrera con fuego incluido, primero los hombres y luego las mujeres, los últimos en llegar recibieron una desagradable noticia. Osmín llegó, olfateó el miedo y encontró un santandereano para llevarlo al infierno.
